La meta de un cristiano, es el cielo. V 1 “Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios” nuestro anhelo es que un día podamos encontrarnos cara a cara con nuestro padre celestial. Esa esperanza hace que podamos soportar cualquier situación por difícil que parezca, y resistamos a las tentaciones del mundo, hoy en día hay mucho cristiano tibio porque no conoce, o no le importa este sueño de un día estar en el cielo. Que le impide a un cristiano poder disfrutar de esta promesa. V 2 “Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra” poner su mirada en la tierra, si nos encariñamos con las cosas que nos ofrece el mundo no vamos a querer ir al cielo, el día en que nos corresponda. Hay una frase que dice “no enriquezcas el camino para que no se empobrezca la meta” esto lo entendí muy bien un día mirando por televisión una carrera de vacas, cada jinete azotaba a su vaca, pero muchos de ellos tenían problemas porque de un lado del camino había potreros llenos de pasto fresco, muchas de ellas se quedaban comiendo, al otro lado del camino había una laguna con abundante agua y muchas de las vacas también se quedaban bebiendo, a pesar de que sus jinetes las golpeaban con desesperación, ellas no querían avanzar en su carrera. El camino era más prometedor que su meta. Como conseguir llagar a nuestra meta. 1. Haciendo morir lo terrenal: V 5 “Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría” como se hace morir el fuego, o igualmente a una persona, una buena forma seria no alimentándola. Nuestra mente es el fuego, y nuestros pensamientos la leña que lo aviva. Si tú y yo estamos meditando de día y de noche en las cosas de Dios, avivamos nuestra pasión por Dios, pero si por lo contrario nos la pasamos pensando en cosas pecaminosas, también avivamos la pasión del mal. 1.1. Si cambiamos de ciudadanía, también debemos cambiar nuestro dialecto. V 8 “Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca” cuando alguien se va a vivir a estados unidos, o simplemente quiere entablar relaciones comerciales con ese país, lo primero que hace es aprender a hablar Ingles, en la vida espiritual sucede lo mismo una vez que aceptamos a Cristo en nuestro corazón, ya nuestra ciudadanía está en los cielos, y por lo tanto nuestra forma de hablar no puede ser igual a la del mundo. Filipenses 3: 20 “Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo” 2. Despojándonos del viejo hombre. V 9 “No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos” en esta nueva relación con Dios debemos olvidarnos de lo anterior, lo mismo si queremos disfrutar de una nueva relación como esposos, es necesario olvidarnos de nuestra vida de solteros, y adaptarnos a lo nuevo, muchos hombres tienen muchos años de casados y todavía, viven deseando las comidas de mamita, y despreciando lo de su esposa. La característica de lo viejo es que cada día se marchita, hasta que se muere 3. Revistiéndonos del nuevo hombre. V 10 “y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno” la característica de lo nuevo es que cada día se va renovando, como el águila, para renovarse no se necesita nacer de nuevo, para ello es necesario estar renovando nuestra manera de pensar. cada día es nuevo disfrútalo. 4. Vistiéndonos de acuerdo a la ocasión. V 12, 14 “Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto” es claro que cuando la palabra de Dios nos habla de vestirnos, no solo se refiere a la vestimenta exterior, se refiere a nuestra forma de ser, debemos sabernos comportar, y disfrutar en cada etapa de nuestra vida, los 15 deben ser los mejores años para quien los tiene, al igual que el que tiene 30, 40, o la edad que tenga. Pero por lo contrario muchos seres humanos viven infelices, el que tiene 15 anhela tener 20, y cuando tiene 20 quiere volver a tener 15. El que tienen 20 quisiera tener cuarenta y cuando los tiene añora sus años de veinte. 5. Haciéndolo todo en el nombre de Jesús. V 17 “Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él” el nombre de Jesús tiene poder, ante el todas las rodillas se doblan. Metas que como cristianos debemos tener: · Esposas: V 18 “Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor.” Este año dentro de todas tus metas, también proponte ser la mejor esposa. · Esposos: V 19 “Maridos, amad a vuestras mujeres ,y no seáis ásperos con ellas.” Esposos este año tenemos muchas metas, cambiar de carro, comprar casa, mejorar el negocio, eso está muy bien, que tal, si en medio de todas esas metas también te propones ser el mejor esposo. No seas tan áspero, muchas veces parecemos lija, o cepillos de acero. No dejas de ser hombre si coges la escoba, o ayudas a preparar el almuerzo, antes por lo contrario el mismo servicio te exalta ante tu familia y los demás. Que nuestro contestar tanto de hombres o mujeres no sea como de militar frustrado. Conquistar tu hogar seria una linda conquista para este año, no lo crees. · Hijos: como hijos, como jóvenes tienen muchos sueños, proyectos de universidad, ser el mejor en el colegio, que hermosos yo se que lo vas a lograr si lo haces en el nombre de Jesús. Pero qué tal si a tus metas le agregas una más, ser mejor hijo en este año. V 20 “Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor” · Padres: que queremos llegar a ser como padres, nuestra meta debe ser que anhelemos ser los mejores. V 21 “Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten” la disciplina no es castigo, la disciplina es enseñar, discipular. · Empleados: qué tal si para este año tú meta como empleado, es ser más eficiente, que no te tengan que estar empujando para que cumplas, o como siervo de Dios, podemos hacer un trato con él para que este año le sirvamos con amor. V 22 “Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino con corazón sincero, temiendo a Dios.” Todas las metas que nos propongamos sea en el templo en nuestros ministerios o de manera secular en el trabajo hagámoslo con amor, como para el señor, si yo hago las cosas como para el señor, significa que quien me paga es el. V 23-24 “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; 24 sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.” |
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