Hoy en día, al igual que en la antigüedad, hay muchas personas que por la gracia de Dios son Cristianos, o al menos se congregan en alguna Iglesia, Dios los ha hecho libres de muchas cosas, pero siguen como ciegos, por qué todavía no se les ha quitado la venda de sus ojos. De nada sirve que Dios nos haya sacado de la oscuridad a la luz, si toda vía seguimos con los ojos vendados. La biblia nos muestra ejemplos de personas que queriendo conocer de Dios, sus prejuicios religiosos y sobre todo los sociales se convierten en una venda en sus ojos que les impide ver la realidad divina. Atenas era una ciudad muy sofisticada, la capital de Grecia, y sobre todo un lugar habitado por muchos artistas y filósofos del momento. V 18 “Y algunos filósofos de los epicúreos y de los estoicos disputaban con él; y unos decían: ¿Qué querrá decir este palabrero? Y otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les predicaba el evangelio de Jesús, y de la resurrección.” Tanto conocimiento y preparación en el mundo los llevaba hacer muy idolatras. Alejados de Dios, la idolatría no solo puede ser figuras en cerámica, muchos idolatran su conocimiento, el dinero a las personas importantes del momento, etc. V 16” Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu se enardecía viendo la ciudad entregada a la idolatría.” De qué sirve tener tanto conocimiento y poder secular, si espiritualmente se anda a tientas, palpando ciegos. No debemos dejar que nuestra capacidad de razonar nos impida ver las maravillas de Dios. V 27 “para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros.” Los de Atenas solo andaban tras nuevas emociones no tenían ningún propósito definido podían creer en cualquier cosa que los emociones así sea por un momento. V 21 “(Porque todos los atenienses y los extranjeros residentes allí, en ninguna otra cosa se interesaban sino en decir o en oír algo nuevo.)”. Se aburrían muy rápido de una teoría o conocimiento y ya estaban buscando otro conocimiento supuestamente más avanzado, hoy en día hay muchos cristianos que escudan su confusión en buscar nuevos niveles de conocimiento, según ellos alimento mas solido. Su confusión es tan grande que en realidad no saben a quién adoran, adoran a un dios desconocido. V 23 “porque pasando y mirando vuestros santuarios, hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio.” El problema de los cristianos sin propósito es que, lo que menos les gusta es que les hablen de Salvación, vida eterna o de la resurrección, lo único que les importa es creer en un Dios que hace milagros. A los cristianos modernos lo que más les asusta es tener que comprometerse con Dios. V 32 “Pero cuando oyeron lo de la resurrección de los muertos, unos se burlaban, y otros decían: Ya te oiremos acerca de esto otra vez.” Hoy no estamos muy lejos del comportamiento de los habitantes de Atenas, muchos cristianos no saben que es lo que quieren, solo buscan emociones, cosas nuevas, se aburren muy pronto de estar en una misma congregación. No creen o muy poca importancia le prestan a la resurrección, para poder vivir como ellos quieren, una parte en el mundo y una parte muy pequeña en la vida espiritual. No conocen a Dios, solo conocen a los milagros Debemos conocer a Dios, para esperar en el, creer que él es todo poderoso. Sanador, y proveedor. Conclusión: pidámosle al espíritu santo que quite de nosotros toda venda de nuestros ojos, si estamos en la luz andemos como hijos de luz |
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