El maestro la empieza a ligar y cuando ya esta lista, la empieza a pintar. Algo muy tormentoso para la vasija, pero necesario para su restauración. Dios a nosotros desde el principio nos hizo perfectos, pero a causa de nuestros pecados, quedamos rotos, imperfectos. El pecado consiste en apartarnos de Dios. La única forma de ser restaurados es pasando por diferentes procesos que nos permitan acercarnos a él. 1. V 1. Dios nos habla en las dificultades: ese problema que tienes puede ser una forma de hablarte 2. V 3. Qué quiere Dios: El quiere que nos acerquemos a él. Los hombres muchas veces somos tercos y cuando estamos bien en todo nunca nos acordamos de Dios 3. V 5. Cómo estábamos, aunque decimos creer en Dios, lo más probable es que estábamos alejados de su presencia, vivíamos cómodos, no estábamos cumpliendo con el propósito de Dios. 4. V 6. Restauración. Cuando nos acercamos a Dios, y nos arrepentimos de corazón, le pedimos perdón y reconocemos nuestras faltas, Dios hace algo maravilloso en nuestra vida, él trae esa verdadera restauración, en nuestra alma, en nuestro cuerpo y en todo lo que nos rodea y de lo cual vivimos Conclusión. Cuando tengamos problemas no le digamos a Dios: ¿Por qué? Más bien digámosle ¿Para qué? Dios permite que nuestra vida se desacomode, con el único fin de acomodarla, pero de acuerdo a su voluntad, la forma como nosotros queremos vivir muchas veces no es la mejor; dejemos que Jesucristo se encargue de nosotros y nuestra vida será perfecta |
|