En el hebreo, la palabra bendición se dice BERAKAH, que significa transferir poder de Dios o su favor. Esto por lo general se lo hacía a través del contacto físico, imposición de manos, un abrazo; científicamente está comprobado que las personas que reciben abrazos de manera regular en un día, no solo viven más, sino que su calidad de vida es mejor, se mantienen saludables; así que si abrazáramos mas, nos evitaríamos muchas visitas al médico. Las personas que mas viven en infidelidad son personas que en su cas reciben muy poco contacto físico. A las personas que sufren de mucha depresión hay sicólogos que les recomiendan tener una mascota a la cual la puedan abrasar, acariciar, y de esta forma liberan mucha de su tención. En griego se dice: EULOGEO que significa alabar o hablar bien de alguien, o transferir el poder de Dios a través de la palabra, cuando alabamos a Dios lo estamos bendiciendo, en este caso entendemos lo que dice el salmo 103: 1“Bendice, alma mía, a Jehová, Bendecir es lo contrario a maldecir. Maldecir es decir mal, o desear mal, bendecir. Es decir bien o desear bien. Bendecir al estilo EULOGEO, es hacer uso del poder de las palabras, al estilo profecía. Es decir; cuando le decimos a nuestro hijo: tú eres un campeón, tú vas a ser un hombre de éxito, con estas palabras lo estamos bendiciendo. Bendecir también es declarar con palabras el deseo bueno hacia alguien. Veamos un ejemplo de esta bendición en la misma palabra de Dios. Números 6: 24 “Jehová te bendiga, y te guarde; Utilizar la palabra para bendecir, es algo maravillo, muchos científicos, han hecho el siguiente ejercicio, plantan dos matas a la vez, a las dos se les da el mismo cuidado, se les echa agua, y se les echa abono. a una de ellas además de esto se le habla, se le dice estas bonita, como as crecido. Etc. Con el tiempo han descubierto, que la planta a la que se le hablaba y se le decía cosas bonitas, ha crecido más, y está mucho más bonita que la otra. Y si esto funciona con las plantas imagínese lo que sucedería con los humanos, si tu quieres tener un esposo(a) hermoso(a) díselo, constantemente, y cada día la(o) veraz mejor. La bendición se trasmite. Efesios 1: 2 “Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo” Para Pablo era muy importante esta bendición, en casi todas sus cartas la repite. 1corintios 1: 2; 2 Corintio 1: 2; gálatas 1:3 Efesios 1: 2. Pablo hacia uso del poder de la palabra para declarar la bendición, no solo les decía que Dios los bendiga, el declaraba con su boca lo que quería que la iglesia reciba. Para poder transmitir bendición es necesario estar en bendición, y sobre todo creer que es bendito. Pablo nos enseña que en Cristo, ya estamos bendecidos con toda bendición. El no esperaba una bendición el ya estaba bendecido. V 3 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo,” no permitas que el diablo a través de otras personas te roben la bendición, al hacerte creer que no eres bendito, o que no tienes bendición. A demás de esto si hemos oído y creído en el evangelio somos sellados por el espíritu santo, hay personas que creen que el espíritu solo se lo siente en algunos lugares, el espíritu santo es la promesa del padre que se cumple en el momento en que creemos en el evangelio de Cristo. Si estamos bendecidos por Dios y además sellados por su santo espíritu, ya podemos considerarnos más que vencedores. V 13 “En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa” Si conocemos estos propósitos de Dios, vamos a vivir en bendición, pídele a Dios que el evangelio de la verdad te abra los ojos del espíritu. V 18 “alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos,” Conclusión: Es bueno que utilicemos el poder de nuestra palabra para bendecir a los demás, nuestra casa, nuestros negocios. No te canses de bendecir a otros a través del contacto físico, abraza a tu pareja, a tus hijos, de seguro te sentirás bien. Y sobre todo recuerda que en Cristo somos bendecidos con toda bendición, y que a través del evangelio somos sellados por el espíritu santo. |
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