Para nadie es un secreto que Dios se está moviendo poderosamente en medio de los niños en el mundo entero y como parte de este mover del Espíritu Santo nació en nuestro corazón la atención a niños bajo el “Ministerio Infantil”. Con una visión muy diferente del modelo tradicional de entretenimiento de nuestros niños, ellos se reúnen para ser entrenados con el fin de servir al Señor, a su familia, a la comunidad y a nuestro país.

Muchas veces miramos por la ventana a los niños en la calle; su vocabulario, sus actitudes y sus costumbres nos hicieron ver la necesidad de hacer algo, ¡ya!, antes que los abrace la homosexualidad, la prostitución, la violación o el maltrato por parte de algunos padres, que los llevaría a ser niños en situación de calle.