1. En lo espiritual: el problema de muchos cristianos está en que no entienden lo que están haciendo, creen que estar con Dios es tan solo leer la biblia y pedirle a Dios muchos milagros, salud, y mucha prosperidad, por eso mientras reciben el milagro son las personas mas entregadas, aleluya, Cristo vive, pero cuando Dios no los complace en todo lo que quieren, entonces se enfrían, reniegan de Dios, y vuelven al mundo, al vomito de donde un día Dios los saco. No entienden que Cristo murió para darnos salvación y vida eterna, estábamos condenados y ahora gracias a su muerte y resurrección somos salvos, las demás cosas solo son añadiduras. 2. En lo personal: muchos ya son adultos y no entienden su vida tanto que todavía no saben lo que quieren hacer con su vida, eso hace que no sean confiables ya que siempre se caracterizan por su irresponsabilidad, en el trabajo en el hogar, en el estudio, en fin en cualquier cosa que intente hacer. La persona que no entiende lo que quiere por lo general es un individuo sin carácter, sin templanza, cualquiera domina su vida. 3. En el hogar: una persona que no entiende su vida es natural que falle en todo, pero en especial en lo que tiene que ver con su hogar; para que el matrimonio marche muy bien es necesario entenderse entre la pareja, y todos los integrantes del hogar. 4. En los negocios: par llegar a ser un gran empresario se necesita mucho más que dinero, se necesita entender el negocio, y su naturaleza, ejemplo un administrador al ser recién egresado de la universidad, conoce las normas administrativas de manera general, pero al ingresar a administrar un negocio es necesario que primero aprenda la naturaleza de ese negocio, y a él le aplique su conocimiento de administrador, si tiene experiencia administrando un supermercado, no quiere decir que esta capacitado para administrar, una finca ganadera, es necesario que para cada actividad primero conozca y comprenda la naturaleza de cada empresa. El entender algo hace que lo llegue a conocer, si entendemos a nuestra pareja, la podemos llegar a conocer, y de esta forma saber que le gusta, y que no le gusta, el conocer a mi pareja me permite llegar a tener una buena relación con ella. De esta misma forma en cualquier actividad que desempeñe en la vida, el hecho de entender lo que estoy haciendo me permite llegar a conocer esa actividad y por lo tanto me es más fácil poderla desarrollar con éxito. La única forma de llegar a tener ese conocimiento es a través de Jesucristo, el nos da la sabiduría y ciencia. V 3 “en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento.” El tener el conocimiento es lo que le da importancia y valía a una persona, en alguna ocasión a un señor se le daño un radio, por más que insistía, nunca pudo arreglarlo, ya sin saber que hacer un día lo llevo al técnico, el lo tomo entre sus manos lo destapo y al darse cuenta de lo que le pasaba, tomo un destornillador, apretó un tornillo y el radio quedo como nuevo, funcionando perfectamente, el dueño del radio muy contento al ver que el técnico arreglo el radio que ya lo daba por perdido, le pregunto cuánto le va a cobrar por el arreglo, el técnico le dijo 10. 000 pesos, el señor muy enojado le dijo que como le va a cobrar tan caro, si lo único que había hecho era apretar un tornillo, eso el también lo hubiera hecho. El técnico muy calmado le expidió la factura de cobro en la cual detallaba el valor cobrado, y decía, 9.999 pesos por el conocimiento, y 100 pesos por apretar el tornillo. Como obtener esa riqueza del entendimiento: 1. No poner en primer lugar nuestro propio intelecto y sobre todo rechazar las costumbres humanas. V 8 “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.” para poder llenar un vaso con algo nuevo es necesario primero vaciar lo viejo que lo tenía lleno. Sobre todo lo más que necesitamos es humildad para recibir nuevas instrucciones, el que cree que ya se las sabe todas, vive estancado. 2. Dejar que Cristo sea quien nos circuncide: V 11 “En él también fuisteis circuncidados con circuncisión no hecha a mano, al echar de vosotros el cuerpo pecaminoso carnal, en la circuncisión de Cristo” es decir Cristo puede arrancar de nosotros aquellas cosas que estorban en nuestra vida, cuando lo hacemos nosotros mismos el dolor nos gana. Esto lo podemos ver cuando tenemos una herida la cual ha sido cubierta por una gasa la cual con la sangre se ha pegado a nuestra piel, si nosotros mismos tratamos de despegarla, el dolor nos impide hacerlo, y a la vez es como si sintiéramos más dolor todavía, pero si lo hace una enfermera, ella si lo puede hacer, y hasta nos causa menos dolor, o al menos esa es la impresión. 3. Morir en Cristo, y Vivir en él: V 13 “Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados” solo en Cristo podemos morir a nuestros pecado y volver a resucitar juntamente con él. 3.1.Solo si aceptamos morir en Cristo logramos romper los decretos que el diablo tenía en nuestra contra, y con Cristo tenemos nuevos decretos, y si el diablo había decretado enfermedad, pobreza a hora los podemos anular y romper en el nombre de Jesucristo y hacer unos nuevos de sanidad, y prosperidad. V 14 “anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz,” Conclusión: La base de la esclavitud es la ignorancia, el desconocer la verdad nos hace esclavos, si tú no sabes cómo funciona algo, siempre estarás dependiendo de los demás, no pidas que siempre te hagan las cosas más bien procura aprender. Lo que aprendo debe ir enfocado a lo que necesito en ese momento, hay gente que se la pasa aprendiendo cosas que las alejan de la verdad. 2 Timoteo 3: 7 “Estas siempre están aprendiendo, y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad.” La verdad nos hace libres. Juan 8: 32 “y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.” El conocimiento nos hace autosuficientes. Todos tenemos habilidades, solo que en muchas ocasiones la pereza nos gana. |
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