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LA PRESENCIA DE DIOS
Julio- 25- 2010- 1 Crónicas 15- 17
	Cuando hablamos de presencia y sobre todo de la presencia de Dios, nos referimos a su manifestación, o de tomar forma en algo, mediante la cual nosotros podamos disfrutarlo, sentirlo, palparlo. Un ejemplo de esto es la energía eléctrica; la energía como tal es algo que no se puede ver ni tocar, a no ser que se manifieste en alguna forma: cuando en una casa se hace la instalación eléctrica desde el contador. Queda instalada en cada una de las habitaciones, y la podemos obtener a través de los tomas. De esta manera esa energía se manifiesta en cualquier cosa dependiendo de lo que conectemos. Si conectamos una nevera la energía se manifiesta en frio, en una estufa en calor, en una licuadora en movimiento y así sucesivamente. La presencia de Dios también se manifiesta a través del espíritu santo en: forma de sanidad, prosperidad, en gozo Salmo 16: 11 “Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; Delicias a tu diestra para siempre.” Descanso  éxodo 33: 14“Y él dijo: Mi presencia irá contigo, y te daré descanso”

Hacer algo para Dios, no es lo mismo que estar con Dios, hay muchas personas, aun pastores mismo que trabajan duro para Dios, pero que nunca están con él, en su agenda está el visitar a todo el mundo, tanto que no tienen tiempo para entrara a la intimidad con  Dios en la intimidad nos habla, nos consuela, nos da fuerzas, nos llena de su amor de su paz.

Es necesario pasar tiempo con Dios, si tu trabajas duro para tu familia estás haciendo lo correcto, tal vez tenemos que hacerlo, piro si no sacas tiempo para estar con ellos, de nada sirve tanto esfuerzo, igual vas a estar distanciado, desanimado, y cada día ese trabajo se te va a convertir en una carga, llegando a tal extremo que ya no vas a querer trabajar para sostener a tu familia.

El tiempo que pasemos con Dios o nuestra familia no debe ser un acto de una sola vez, recuerda que una sola sesión en el gimnasio no va a arreglar tu cuerpo, es mas la primera sesión a lo mejor te deje aparentemente peor, con mucho dolor, y cansancio.

Para poder sentir la presencia de Dios, como la de cualquier persona es necesario tener en cuenta algunas sugerencias muy importantes que nos da la palabra.

1.      Un lugar especial. V 1 “Hizo David también casas para sí en la ciudad de David, y arregló un lugar para el arca de Dios, y le levantó una tienda” David tenía grandes proyectos entre ellos construir muchas casas, pero para él lo más importante era tener una casa para Dios, el templo se convierte en ese lugar de encuentro con nuestro Dios. Un lugar donde pueda estar quieto reposado, sin ninguna interrupción. Salmo 46: 10 “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios;
Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.”

Con nuestra pareja es necesario que tengamos nuestro espacio propio, o que busquemos un tiempo para estar a solas, hoy en día se ha perdido mucho ese tiempo especial, por lo reducido de nuestras casas, en la misma cama duermen la pareja, el hijo, el nieto, los sobrinos, la mascota. El esposo bien apasionado besando a su esposa y cuando, abre los ojos era el perro. Y los esposos cada día se enfrían en su relación de pareja, provocando en muchos hogares grandes conflictos.

Si la empresa que tienes funciona en la misma casa, ten muy en cuenta tu lugar de trabajo y tu casa o lugar de descanso para que tu vida no se vuelva rutinaria, y aburrida, no conviertas tu cama en un taller. Si estas estudiando busca un lugar donde puedas hacer con facilidad y concentración tus tareas, hay personas que para estudiar o hacer las tareas lo hacen en la cama, mientras ven televisión, y después se preguntan porque no rinden en lo que hacen.

2.      No lo hagas solo: V 4 “Reunió también David a los hijos de Aarón y a los levitas;” las fuerzas de Dios se manifiestan a través de la unidad de su pueblo, ya que Dios no viene por una persona sino por un pueblo, aislarse y trabajar solo es muy fácil, pero aprender a trabajar en comunidad es lo complicado para muchas personas. Par manejar un vehículo solo se necesita una persona, pero para empujarlo se necesita más de uno y dependiendo del tamaño del vehículo se necesitan mas, para pedirle a Dios por un milagro basta con una persona, pero si queremos mover las fuerzas sobre naturales se necesitan más de uno. Mateo 18: 18-20 “De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo.
18:19 Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos.
18:20 Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.”

Si en el hogar queremos vivir con lo justo y necesario, con una sola persona que trabaje a lo mejor le alcance, pero si quiere llegar hacer una familia de muchos recursos económicos, es necesario que nos pongamos de acuerdo todos, si no hay empleo aprende un oficio, y vivirás bien.

3.      Santificación. V 12-13 “y les dijo: Vosotros que sois los principales padres de las familias de los levitas, santificaos, vosotros y vuestros hermanos, y pasad el arca de Jehová Dios de Israel al lugar que le he preparado; 
15:13 pues por no haberlo hecho así vosotros la primera vez, Jehová nuestro Dios nos quebrantó, por cuanto no le buscamos según su ordenanza.” Si queremos sentir a Dios es necesario vivir en santidad, recuerda que sin santidad nadie puede ver a Dios. Hebreos 12: 14 “Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor” cuando hablamos de santidad no necesariamente hablamos de tener aureola, o estar en un pedestal, la santidad significa apartado de, para. Santidad es más una actitud, y una forma de vida sana; hay parejas que su forma de vida ya no es la más sana, es normal que la mujer o el hombre que en su mente tiene a otro o a otra, ya no sienta nada por su pareja, que no haga las cosas con entrega; en lo espiritual es lo mismo, si tu ya no sientes nada, si no sientes compromiso por las cosas de Dios, revísate en tu corazón, puede ser que tu relación con Dios ya no sea muy sana, si en tu mente solo hay pensamientos pecaminosos, u otras cosas ocupen tu mente es muy difícil que sientas algo con Dios.

4.      Crear un ambiente propicio: V 16 “Asimismo dijo David a los principales de los levitas, que designasen de sus hermanos a cantores con instrumentos de música, con salterios y arpas y címbalos, que resonasen y alzasen la voz con alegría.” Para atraer la presencia de Dios se necesita de alabanza y adoración; si estás en tu alcoba apaga el televisor. para sentir la presencia de tu pareja se necesita de un lugar adecuado, apaga el televisor, quítate el overol, los rulos, cuando más concentrado está siente que algo le talla la espalda y preciso es un rulo, a esa hora se paran a buscarlo.

Si vas a estudiar o a trabajar, prepara el ambiente, es muy difícil estar contento en el trabajo escuchando la cuchilla. Pon una música que te estimule, y si es acorde a tu creencia cristiana mucho mejor.

5.      Da lo mejor de ti: V 22 “Y Quenanías, principal de los levitas en la música, fue puesto para dirigir el canto, porque era entendido en ello.” Si vamos a darle algo a Dios tiene que ser lo mejor, el mismo nos ayuda en esto, por eso el dejo los dones y los talentos, David busco personas entendidas, es decir que conocían y sabían hacerlo, no basta con querer, es necesario saber; hay personas que quieren estar en la alabanza, cante aunque no cante; o en las danzas dance aunque no dance, si no lo sabes hacer, tienes que aprender, el que tiene el don le va hacer más fácil, y el que no lo tiene va a tener que esforzarse más.

En el hogar: también podemos cada día esforzarnos por dar de lo mejor, ser mejor esposo, mejor esposa, mejor hijo, o mejor padre; esto muchas veces causa en los demás burla, pero si estamos seguros de lo que estamos haciendo no nos debe importar. V 29 “Pero cuando el arca del pacto de Jehová llegó a la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, mirando por una ventana, vio al rey David que saltaba y danzaba; y lo menospreció en su corazón”

6.      Cuidar la presencia de Dios todos los días: 16: 37 “Y dejó allí, delante del arca del pacto de Jehová, a Asaf y a sus hermanos, para que ministrasen de continuo delante del arca, cada cosa en su día” la relación de Dios se conserva si la estamos buscando todos los días; el hogar va hacer mejor si cuidamos de nuestra relación todos los días, el amor es como una planta, sembrarla puede ser fácil, cuidarla es lo que muchas veces nos es difícil, no queremos dedicarle tiempo, ni recursos.

7.      Hacerlo por convicción y no por emoción: 17: 1-2; 11-12 “Aconteció que morando David en su casa, dijo David al profeta Natán: He aquí yo habito en casa de cedro, y el arca del pacto de Jehová debajo de cortinas. 
17:2 Y Natán dijo a David: Haz todo lo que está en tu corazón, porque Dios está contigo” David estaba tan contento de estar en la presencia de Dios que quería hacer de todo, y el profeta se emociono tanto de verlo que le dijo haz todo lo que quieras, que Dios está contigo.

Dios le corrigió: V 4,11-12 “Ve y di a David mi siervo: Así ha dicho Jehová: Tú no me edificarás casa en que habite; Y cuando tus días sean cumplidos para irte con tus padres, levantaré descendencia después de ti, a uno de entre tus hijos, y afirmaré su reino. 
17:12 El me edificará casa, y yo confirmaré su trono eternamente” para servirle a Dios no debemos hacerlo llevados por la emoción, una persona emocionada solo trabaja mientras le dure la cuerda, después deja abandonado el trabajo, las personas que actúan por emoción no son confiables, ya que son muy inconstantes, trabajan de acuerdo a su estado de ánimo.

No tomes decisiones en la vida solo por la emoción del momento, los negocios pueden salir mal, la relación de matrimonio o noviazgo puede ser un fracaso, al primer obstáculo tu decisión puede cambiar. Hoy lo amas con todo tu corazón, mañana otro puede estar ocupado su lugar.

El matrimonio y los hijos tienen que ser el resultado de una planeación, y no el producto de una equivocación, o improvisación.

Conclusión:

El atraer  y el disfrutar de la presencia de Dios o de alguien depende de nosotros, si ya no sentimos la presencia de Dios revisemos nuestra vida, no confundamos presencia, con emoción del momento